viernes, 29 de julio de 2011

CAUSA SUR, RECUPERAR LO NUESTRO, en PROYECTO SUR, ADHERIMOS AL COMUNICADO SIGUIENTE

 COMUNICADO

Los organismos de DDHH Córdoba, expresamos nuestro mayor repudio a la actuación policial en la ciudad Libertador General San Martín, Jujuy, que en el día de ayer arremetió contra el pueblo con una violencia indiscriminada, dejando un doloroso saldo: la muerte de 4 personas y un número indefinido de heridos, entre ellos niños y ancianos.

 Acompañamos a los sectores organizados de la Provincia que rechazan la represión como respuesta a los conflictos sociales. La decisión tomada por el Juez Zamán y llevada delante por las fuerzas de seguridad pretendió silenciar el reclamo de miles de familias que ponen al descubierto una situación de emergencia habitacional en la provincia, mediante la utilización de palos, gases y balas. Creemos que ese no es y nunca será el modo de resolver los problemas sociales.

 Es fundamental ubicar el escenario de los hechos, en un predio que pertenece a la familia Blaquier, propietarios del monopolio Ledesma SAAI. Este ingenio azucarero arrastra la más oscura de las historias en la Provincia de Jujuy, se trata de un caso clave de complicidad civil con el sistema de exterminio que implementó la última dictadura: Ledesma brindo su infraestructura y sus vehículos para llevar adelante “el apagón de Ledesma” en 1976, que además de cientos de torturados y detenidos dejó un saldo de 30 militantes desaparecidos.

Hoy, una vez más, la participación de este grupo empresario apoyando la represión a través de sus fuerzas privadas de seguridad, demuestra que continúan con las viejas prácticas de acompañar toda embestida contra el avance del pueblo. No se trata de las 15000 hectáreas que esas familias requieren para defender el más humano de los derechos; lo que realmente preocupa a los feudales genocidas de Blaquier es desarticular cualquier intento de organización de quienes defienden una vivienda digna y una tierra que les pertenece por tantos años de explotación y desigualdad.

Exigimos a la  justicia la inmediata investigación de los hechos y castigo a los responsables
Exigimos al gobierno provincial la resolución del problema habitacional.
Nos solidarizamos con  los familiares de  los compañeros de los asesinados.
¡Nunca Más represión  en DEMOCRACIA ¡


Familiares de Desaparecidos y Detenidos Políticos de Córdoba
Abuelas - Filial Córdoba
Asociación de Ex Presos Políticos Cba
H.I.J.O.S. - Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio 


Abuelas de Plaza de Mayo Córdoba
Duarte Quirós 545, 3º "C"- Cordoba

Alcira Argumedo, Jorge Cardelli...en Córdoba... Causa Sur presente...

http://youtu.be/8jIY-1lO4_w

miércoles, 20 de julio de 2011

Juez está distante del kirnerismo, De la Sota y Aguad, en la orilla contraria, a mis amigos del campo popular kirnerista

Juez está distante del kirnerismo, De la Sota y Aguad, en la orilla contraria

El enemigo del campo popular no es Luis Juez. Es De la Sota. Como Aguad, con todo respeto,  está fuera de la competencia, el antagonista concreto del campo popular, en este proceso electoral,  es De la Sota.

 A quien hay que derrotar en las urnas y derrotarlo  como emblema del liberalismo más crudo es a De la Sota. No podemos distraer el voto del campo popular  en las variopintas opciones kirneristas. Todas válidas, pero ahora inconvenientes en esta batalla contra el mejor alumno e imitador de Carlos Menen.
El ícono de los intentos privatizadores, de los negocios con los grupos económicos, del endeudamiento provincial, de la política como propaganda con espejitos de colores,  todo teñido con el estilo “Carbonetti-Falo”, es De la Sota.

Si gana Juez, gana el campo popular. Si gana De la Sota pierde el campo popular.

Es cierto, el Frente Cívico, el Partido Nuevo y el mismo Luis Juez tienen sus limitaciones, sus contradicciones, sus quiebres, sus ambivalencias, sus límites, sus tensiones.  Es cierto, como también los tiene el kirnerismo, pero ambos dentro del campo popular. Esa es la pequeña y gran diferencia con el PJ delasotista. Juez esta distante del kirnerismo, De la Sota en las antípodas.

Amigos y cumpas kirneristas, si el campo popular divide el voto entre tantas opciones, seremos útiles al proyecto del enemigo profundo.

Las oportunidades no se analizan demasiado, se las aprovecha. Tenemos la oportunidad de un salto cualitativo si derrotamos el menemismo reciclado de De la Sota. La oportunidad es Luis Luez. Todo lo demás lo vamos a  discutir. La oportunidad no la podemos dilapidar.

Pbro. Nicolas Alessio

miércoles, 13 de julio de 2011

EL TRABAJO SEXUAL NO ES DELITO

Córdoba 6 de Julio del 2011


COMUNICADO DE PRENSA

Desde la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina, filial Córdoba, queremos repudiar enérgicamente el decreto presidencial Nº 936/2011 sancionado ayer por la Presidenta Cristina Fernández, que prohíbe "los avisos que promuevan la oferta sexual" por "cualquier medio" de comunicación en todo el país, "con la finalidad de prevenir el delito de trata de personas con fines de explotación sexual y la paulatina eliminación de las formas de discriminación de las mujeres".
Entendemos que estas medidas, claramente punitivas, no hacen otra cosa que seguir arrastrando a las mujeres a la clandestinidad y al manejo de las grandes mafias. Si realmente quisiéramos combatir estos modos de explotación, en primero lugar no se buscaría sacar la poca información como son los anuncios en los medios de comunicación que localizan alguno de los modos de ejercicio del trabajo sexual. Estas acciones no hacen otra cosa que atentar con el derecho constitucional al trabajo (Art. 14) y sus modos de manifestación proclamados por la OIT[1] y acordados en el 2005 con Néstor Kirchner bajo el decreto Nº 1086/05[2] que promueve la legislación de esta actividad de subsistencia bajo las normativas de un trabajo formal.
Además creemos que esta es una medida severamente discriminatoria, ya que se pondera esta actividad como la más oscura y terrible, cuando millones de personas en todo el mundo sufren estos atropellos, por grandes imperios comerciales, como marcas deportivas, de cosméticos, de construcción, etc. Sabemos, y esta comprobado que hay personas que son tratadas, violadas, vendidas, a talleres de costura, a casas como empleadas domesticas, aserraderos, empresas agropecuarias y a cortaderos de ladrillos. ¿También deberíamos prohibir las publicidades de estas multinacionales? Es de público conocimiento que utilizan el trabajo esclavo e infantil para realizar los grandes productos de moda. ¿Cuáles son los intereses que rodean esta gran preocupación por la denigración de los cuerpos de las mujeres? Si son tan reales, porque no sancionamos con las mismas energías y en el mismo nivel de formalidad, los atropellos, las vulgaridades, la desfachatez que en los programas en la televisión por aire, como el de Marcelo Tinelli, se exponen diariamente sin que nadie tome medidas y siendo funcional a un mercado cada vez más redituable.
¿Por qué se toman medidas en el nombre del sector de la mujer trabajadoras sexuales sin tal sólo consultar a quienes afectan? La organización AMMAR, el sindicato que representa esta actividad, tiene más de 16 años de historia y trabajo reconocido a nivel mundial, sólo en Córdoba representa la voz de más de 700 mujeres, que con esta actividad mantienen su familia, dan de comer y educan a sus hijos. ¿El Estado se va a hacer cargo de contener a estas familias? ¿Cuáles son las políticas sociales que se pondrán a disposición del sector?
Tal como lo viene sosteniendo nuestra Asociación la forma idónea de combatir la trata de personas en el ámbito del trabajo sexual, es la regulación legislativa de la actividad desarrollada por nuestras asociadas, dándole un marco de protecciones laboral, social y sindical. Y no persiguiendo a estas mujeres, sostén de familia, como las verdaderas delincuentes, cuando las redes siguen actuando con el aval de fuertes fuerzas políticas y económicas.
EL TRABAJO SEXUAL NO ES DELITO. EL TRABAJO SEXUAL VOLUNTARIO EJERCIDO POR MUJERES MAYORES DE EDAD NO ES IGUAL A LA TRATA DE PERSONAS. LA TRATA DE PERSONAS NO ES EXCLUSIVA DEL TRABAJO SEXUAL.
Por eso exigimos:
- Derechos Humanos para todas.
- La reglamentación del trabajo sexual como trabajo.
- La búsqueda real de víctimas de trata de personas.

lunes, 4 de julio de 2011

Excelente carta a Dr Bernardo Kliksberg de GRR sobre alimentos, soja y demas...

El reportaje a Bernardo Kliksberg tambien es imperdible...en:

http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-170958-2011-06-28.html

Buenos Aires 29 de Junio de 2011

Dr Bernardo Kliksberg
Chief Advisor to the Regional Bureau for Latin America and the Caribbean 
Asesor Principal de la Dirección del PNUD para América Latina y el Caribe,
United Nations Development Programme
One United Nations Plaza
New York, NY 10017 USA


Estimado Doctor Kliksberg,

Nos dirigimos a Usted motivados por algunas de sus expresiones en el reportaje publicado el 28 de Junio pasado por el matutino Pagina12 de Buenos Aires-Argentina.   En la nota a que nos referimos, Usted dice que América Latina produce alimentos para tres veces su población. En el caso de Argentina la producción de soja, que prevalece sobre todo lo demás, está destinada a la alimentación animal y a la producción de aceites, y últimamente también a biodiesel para la exportación.  Como sabrá el país tiene, según cifras oficiales  más de 15 millones de hectáreas ocupadas con este cultivo transgénico (según cifras no oficiales se indicarían bastante más de veinte millones) que conllevan un paquete “tecnológico” acorde a esos objetivos, compuesto por substancias químicas de todo tipo, por los biocidas: herbicidas, insecticidas, fungicidas, bactericidas, viricidas, que son tóxicas para vegetales, animales y personas. Algunos de estos agrotóxicos son totalmente prohibidos en países  que  se caracterizan a sí mismos como desarrollados. Creemos que definir a la soja y particularmente a la soja transgénica, como un alimento es un escándalo ético. Esperamos convencer a Usted de lo mismo, y que lo pueda expresar públicamente. Entendemos que su influencia como asesor de políticas públicas en Naciones Unidas es muy importante, y la admisión de este reconocimiento por su parte ayudaría a comenzar a poner en blanco sobre negro, conceptos tan primordiales como el que queremos expresar cuando hablamos de alimentos.

Gracias al artículo somos informados sobre su designación para asesorar a la Organización Mundial de la Salud sobre los determinantes sociales de la salud. Su aproximación al tema nos parece interesante. Tiene razón en cuanto al acceso al agua potable es uno de los determinantes sociales que afectan a la salud humana . En nuestro país el acceso al agua potable es un problema, coincidimos, pero no prioritario. El problema es el que el gobierno y empresarios que se dicen responsables no tienen voluntad de ver, sino por el contrario, la voluntad es de tapar cuales situaciones afectan al agua y las cuencas, alejando cada vez más la posibilidad -para otros un nuevo negocio- de ofrecer agua potable. Nos referimos a los monocultivos industriales especialmente de soja y a la aplicación de agroquímicos.

Aquí los problemas provenientes del modelo productivo de la sojización, en relación a sus efectos en la salud humana, los visualizamos y proyectamos en cuatro dimensiones : 1) Las consecuencias de la aplicación de agroquímicos de las poblaciones que viven en medio de las plantaciones, 2) las consecuencias del avance de la frontera agropecuaria en la salud humana  3) Los determinantes sociales de enfermedad, devenidos por la expansión de los sojales en el territorio Argentino incluidas superficies ocupadas anteriormente por montes nativos, tales como el desarraigo, el trabajo precario y esclavo, la vivienda precaria y el hacinamiento 4) Las consecuencias de la ingesta de productos comestibles a base de soja, generalmente consumidos por los sectores sociales más bajos tanto en las zonas rurales como en las urbanas y periurbanas.

En el primer caso, la contaminación del agua, el aire y los objetos de uso doméstico que afectan a los habitantes de los pueblos rodeados por sojales es muy alta.    Sabemos   sobre los males ocasionados por las substancias que se aplican en las plantaciones, y que el número de nacimientos de niños con malformaciones congénitas, enfermedades de la piel, respiratorias, cánceres , es mucho, muchísimo más alto que cuando no se plantaba soja. Desgraciadamente la construcción de  la evidencia con que se cuenta para registrar el problema es anecdótica. Nuestro testimonio es  de primera mano , ya  que un número importante de los miembros del GRR Grupo de Reflexión Rural,  viven en las zonas afectadas.  Los que vivimos en las urbes o en el exterior  hemos  caminado el país para verificar la tragedia del sistema de sojización. Son numerosos los documentos escritos y gráficos realizados por nosotros y muchos otros investigadores para  que alguien intente negar este desastre. Sólo con recorrer el pais y visitar los pueblos rurales rodeados de soja , el lego bien intencionado  puede entender sobre lo que estamos hablando .   

La segunda dimensión, es la de las zoonosis. La documentan los profesionales e investigadores de la salud quienes reconocen  los efectos que el avance de la frontera agropecuaria de la soja en Argentina ha tenido sobre el surgimiento de brotes epidémicos de leishmaniasis cutánea como visceral , producto de la deforestación que sólo es frenada cuando la topología de las zonas afectadas no permiten que se continúe tirando la vegetación abajo. Otras enfermedades emergentes son las producidas por: “ fiebres debido a Rickettsias como las fiebres maculosas, las fiebres manchadas, que pueden tener desenlaces fatales, y están asociadas a garrapatas que a su vez están asociadas a roedores”. En las cortinas o fajas ecológicas que se dejan al deforestar, se concentran roedores y el riesgo de Hantavirus para los pobladores aumenta en forma muy importante. La siembra directa lleva a las conocidas "ratadas" como otra de las consecuencias mencionadas por los profesionales de la salud. Es decir que con la siembra directa y la soja, aparte de la toxicidad ambiental consecuencia de profundos desarreglos eco sistemáticos, se están generando enormes peligros sanitarios.

La tercera dimensión, también la conocemos por experiencia propia. Nos referimos a que la producción de soja en las ultimas dos décadas ha provocado el éxodo rural de muchos pobladores rurales. El desarraigo por destierro forzoso, por la fuerza de la violencia de la sojización y los monocultivos, sumados a todos los mecanismos sociales asociados: para-militares, policías, "judiciales", etc., es un determinante social relevante que provoca enfermedades así como desgarramientos familiares, desplomes culturales, desarraigo, crispación generalizada y violencia. El destierro esta intrínsicamente relacionado a la existencia de villas de emergencia y marginalidad en las ciudades, así como al impresionante crecimiento del poder “narco” en las zonas periurbanas, y esto encontramos que Usted no lo reconoce cuando habla de la problemática habitacional en las urbes.   

La cuarta dimensión que para nosotros es particularmente problemática sería la relacionada con la soja que se utiliza en la elaboración de productos comestibles más baratos que  saturan  las góndolas de los supermercados urbanos, desde chorizos a alfajores, pasando por yogures,  quesos y otros productos de las cadenas agro alimentarias y de la industrialización de alimentos propios del Agronegocio imperante como modelo económico. Hay un efecto que no se registra y que nuevamente la evidencia anecdótica señala que constituye un problema sanitario, nos referimos a la ingesta de productos no tan solo hechos con granos contaminados por  agrotóxicos sino a pastas básicas con altos contenidos de fito-estrógenos.  En este caso, el consumidor ( sobre todo el de menos recursos) tiene acceso principalmente a productos hechos con materias utilizadas para forraje en el exterior, convertidos en comida barata y peligrosa para el mercado interior. La pobreza y la ignorancia (de las clases medias también) lleva a comer soja disfrazada, los efectos en la salud humana no se estudian críticamente, la industria de la alimentación en nuestro país es muy poderosa para avanzar con investigaciones en este terreno. Los productos llamados orgánicos, que son los mismos que tradicionalmente el Argentino supo consumir anteriormente sin certificaciones, han devenido comestibles de lujo que se tienen en el mercado, pero a similar precio que en los mercados consumidores de los países ricos.

Sabemos que no hay voluntad política de prevenir los problemas mencionados porque el circuito comercial de la soja es usado para pagar las deudas contraídas por el estado de forma legitima e ilegitima en las últimos treinta y cinco años,  otra parte del dinero se re-distribuye en planes sociales y en el llamado "fondo sojero" para embellecer municipios (asfalto, plazas, etc). Esto explica porque es inexistente la voluntad política de saber qué está ocurriendo realmente, cosa que sería fácil saber por medio de estudios epidemiológicos serios. Y a lo que sería asimismo fácil de poner freno con el fomento estatal para volver a vivir en el campo y con la prohibición de abastecer  a la población con comidas elaboradas a partir de forrajes contaminado. Por lo tanto, las propuestas de políticas sanitarias basadas en los determinantes sociales son sistemáticamente desechadas o desnaturalizadas en el caso de Argentina, ya que no es conveniente, para el sistema económico  y empresarial implantado, que se conozcan las consecuencias de ese modelo productivo (modelo que, en la economía tradicional, reduce estas consecuencias a la hipócrita expresión de "externalidades").  

Seguramente a organismos como la OMC nuestras historias, al ser anecdóticas,  no cuentan como válidas y suficientes para recomendar políticas sanitarias.  Entonces, en vez de solucionar un problema considerando los determinantes sociales, lo que una seria planificación de los servicios de salud  haría, se continúan profundizando los problemas que describimos. En otras palabras, que  las discusiones sobre políticas sanitarias basadas en los determinantes sociales caerían en saco roto en el caso de Argentina si no se logra ver el problema que conlleva la agricultura industrial de la soja. Queremos enfatizar que al ignorar el problema, lo únicos que se seguirán beneficiando, serán las arcas públicas y empresariales.

Nosotros creemos que se tendría que detener la expansión del cultivo y paulatinamente sustituirlo por siembras alternativas y menos intensivas que sirvan, sobre todo,  a que los argentinos se alimenten de forma variada y sana, como muchos lo supimos hacer antes de la entrada de los sojales en nuestros territorios. El que Usted como uno de los principales asesores de  la OMS admita como determinante social los efectos negativos del modelo productivo de la soja y sus circuitos industriales sobre la salud humana seria un gran avance.  Esta carta la hacemos pública, esperando  desde ya su  necesaria  respuesta que también  haremos pública, lo hacemos considerando la gravedad  de lo manifestado y apelando a su probada sensibilidad en defensa de la salud poblacional.
Atentamente.

Grupo de Reflexión Rural de la Argentina


Stella Maris Semino
Helligkorsvej 15 A
Roskilde 4000
Dinamarca

viernes, 1 de julio de 2011